Roberto Gutiérrez/El Rayo/fotos
*Afectadas calles, familias, viviendas, escuela, comercios y estanque Lagunillas
Pese a que ha sido constantemente denunciado durante años por llevar el agua con desechos contaminantes de las empresas de la zona industrial y el Parque WTC, el Canal Dámaso que cruza la Delegación de La Pila y vierte el agua sucia en el estanque Lagunillas, el cual hasta hace algunos años permitía regar las sembradíos y parcelas de La Pila. Hoy solo hay contaminación en el ambiente, el aire, las calles y todo lo que alcanza a su paso, lo que se recrudece cada que hay tormentas y se une con el agua limpia que baja de la Sierra de San Miguelito, líquido que alguna vez se usó hasta para tomar. Usarla en las casas es actualmente es prácticamente imposible so riesgo de morir por los metales que arrastra de la zona industrial y que van a parar vía el Canal Dámaso y al estanque Lagunillas, que era el «oasis» de La Pila, dónde se iba a pasear e incluso paraba el turismo y ahora está convertido en un pantano, con peces muertos, parcelas antes florecientes ahora pestilentes por la contaminación y todo lo que gira a su alrededor muere lentamente.
Los vecinos repiten lo que ya es frecuente cada que hay tormentas, «Se desbordó el canal Damaso y nos invadieron las aguas negras del Parque WTC, en colonias como Emiliano Zapata y Barrón entre otras de la La Pila».
Y dicen «En esta zona no hay presa qué capte el agua hasta el estanque Lagunillas, así que el agua que baja de la Sierra de San Miguelito, se junta con la del desagüe de la Zona Industrial e invade, además de calles, escuelas, negocios, todo lo que encuentra a su paso, hasta el camino a Jaralito en la delegación.
«Todos estos caminos no tiene señales, si cuando no llueve está peligroso, imagínese cuando hay tormenta «. Dicen.
Aparte entras a este camino y no hay como regresarse».
Son como kilómetros para llegar al jaralito.desde carretera 57.
En el 2017, Protección Civil Municipal y Conagua, visitaron la zona y anunciaron un proyecto de remediación de las bajadas de agua de la Sierra de San Miguelito, para mitigar las afectaciones provocadas en temporada de lluvias en la demarcación de La Pila, de eso hace ya ocho años que se anuncio y las cosas siguen igual.
La solución no se ve cerca reclaman los vecinos y parece que estamos condenados a vivir entre la «porquería». No hay obra pública municipal y en La Pila tenemos muchas necesidades. No le dan presupuesto, las comunidades como Arroyos, Terreros, Cerritos, entre otros están igual.
El municipio de la capital y el gobierno no le quieren invertir y el abandono ya pesa».
La contaminación es un problema constante, que se junta con la inseguridad; el problema de la movilidad que hace crisis en el Eje 140, dónde urge un puente. Hay abandono, desidia y una zona que debería ser un ejemplo de desarrollo, por las múltiples empresas, nacionales e internacionales, de clase mundial que aquí se ubican, es una vergüenza, tanto en cuestión ecológica, por las aguas negras que circulan a cielo abierto, cuerpos de agua y ambiente contaminados, como a la mala movilidad, con cruces que ponen en riesgo a los trabajadores que se trasladan diariamente a la Zona Industrial.
Nuestro futuro es incierto y no sabemos que va a pasar.
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