Roberto Gutiérrez/El Rayo/Fotos y video
Como cada año Villa de Pozos vivió el Viernes Santo, con la participación de cientos de familias, que caminaron por las calles con sus Cristos, en señal de dolor por la muerte de Jesús. Acompañados con música tradicional, cada uno vivió a su manera el pesar de la Crucifixión y unidos en grupos, escucharon previamente en el atrio de la parroquia de San Francisco, las palabras del sacerdote Benjamín Moreno Aguirre, sobre el significado y esperanza de esta ceremonia.
La plaza principal de Pozos, fue convertida en un edén de flores y ofrendas, que formaron parte de la imagen que, en estas fechas, desde hace más de 100 años, los pobladores de este lugar conmemoran con fe y esperanza, unidos en torno a una tradición que ha perdurado y que crece cada vez más.
Sitio donde resuenan las tradiciones, que son símbolos de nuestra entidad, que han sido llevados a muchos lugares del país y del mundo, por quienes la han vivido aquí y la difunden como una tradición única y antiquísima, que se celebra en este lugar que espera pacientemente se le devuelva su categoría de municipio 59 de San Luis Potosí.
Niños, jóvenes, hombres y mujeres de todas edades como todos los años recordaron la muerte de Jesús y enlazaron sus esperanzas de una vida mejor, a ese episodio, que nutre de esperanzas a todos. El jardín principal, se convirtió en un mosaico, de colores que reflejó el dolor por la muerte de Jesús, pero a la vez por ver renacer en la esperanza de un futuro distinto.
Cientos de personas llenaron las calles y presenciaron la ceremonia de inicio, en la Plaza Histórica de Villa de Pozos, que ha visto transcurrir por varios siglos, sucesos que forman parte de nuestra historia nacional, desde la fundación de San Luis Potosí.
La Peregrinación de los Cristos, fue hoy una vez más una herencia, que ha logrado trascender a todas partes y por muchos años, que ha dado identidad a Villa de Pozos, lo que en esta Semana Santa de 2024 se refrendó como parte de nuestra historia y nuestra cultura